APRENDER A LEER CON EL MÉTODO DIVERLEXIA
Nivel 1: Conciencia Fonológica
Actividades para facilitar el aprendizaje de la lectura-escritura en niños que aún no saben leer o en lectores iniciales que están mostrando ciertas dificultades para aprender.
Cliente verificadoExcelente material para trabajar las habilidades prelectoras en los peques. Bien secuenciado. Consignas claras.
Cliente verificadoExcelente material, me encanta la evaluación preliminar, para conocer el perfil del niño. Muy organizado, colorido y basado en evidencias científicas.
Cliente verificadoel material es bueno pero como hay que imprimirlo en color la relación calidad precio es alta
Cliente verificadoAmeno para mis alumnos y cumple expectativas respecto al aprendizaje de habilidades fonológicas
Cliente verificadoMe parece un buen material. Completo, variado y atractivo para los niños/as. Muy útil para abordar la base del proceso de lecto- escritura.
¿Qué encontrarás en este cuadernillo?
Un Programa de Entrenamiento de la Conciencia Fonológica con más de 100 actividades orales que van incrementando la dificultad y no requieren saber leer.
Un conjunto de actividades complementarias para reforzar otros prerrequisitos viso-perceptivos y grafomotrices.
Una evaluación inicial que se repite al final para valorar la evolución, detectar puntos de mejora e identificar posibles dificultades persistentes.
¿Qué habilidades se trabajan?
De manera explícita:
Conciencia léxica (identificación, morfosintaxis y relaciones entre el vocabulario).
Sensibilidad a la rima (prosodia, focalizar en la sonoridad del lenguaje).
Conciencia silábica (segmentar, identificar, comparar y manipular sílabas).
Identificación de sílaba tónica (prosodia, focalizar en la entonación de las palabras).
Habilidad viso-perceptiva (discriminación de símbolos por comparación).
Direccionalidad de la escritura
Grafomotricidad
De manera implícita
Conciencia fonémica (comparación y discriminación de fonemas en tareas de conciencia silábica).
Memoria fonológica (funcionalidad de la memoria operativa verbal).
Vocabulario (selección de palabras variadas para ampliar el léxico).
Familiarización con las letras (introducción de letras como símbolos gráficos sin que sea necesario reconocerlas).
¿A quién va dirigido?
Antes de saber leer
Me prepara: Potencia la madurez de habilidades esenciales para adquirir después la lectura-escritura con más facilidad (Educación Infantil a partir de 4 años).
Mientras aprendo a leer
Me ayuda: Aprendo a leer antes, de manera más sencilla, comprendiendo mejor lo que hago y esto me motiva (entre 5 -7 años).
Leo pero con mucha dificultad
Me corrige: Contar con una representación fonológica del lenguaje más estable ayuda a reducir los errores en lectura y escritura (omisiones, inversiones, sustituciones…).
¿Cómo se utiliza?
• El adulto como guía. Necesito que me ayudes, me hagas pensar y te diviertas conmigo.
• Trabajo todas las semanas con constancia y con objetivos claros. Creamos un hábito.
• Nunca hacemos tareas para las que aún no estoy preparado. Si no puedo, volvemos atrás.
• Desarrolla todo mi potencial. Complementa este trabajo leyéndome cuentos, jugando con las palabras nuevas, ayudándome a inventar historias…
• Enséñame cómo evoluciono. Dame un abrazo cuando aprendo algo nuevo, valora cada esfuerzo y muéstrame cuánto he aprendido.
FUNDAMENTOS BÁSICOS
• Me ayuda a aprender a leer y a escribir con más facilidad y sin errores.
• Me motiva porque son tareas que domino. Me siento capaz porque puedo.
• Despierta mi interés por el lenguaje y por la lectura. ¡Quiero aprender a leer!
• Desarrolla el vocabulario y la competencia lingüística, esenciales para la comprensión y la expresión verbal y para el acceso y la organización del léxico.
• Desarrolla el metalenguaje: diferenciar palabras, sílabas y oraciones, introducir categorías gramaticales…
• Fomenta la funcionalidad de la memoria operativa, esencial en el aprendizaje académico.
• Desarrolla la discriminación visual y la direccionalidad, favoreciendo el análisis detallado de estímulos gráficos como las letras o los números y reduciendo las rotaciones ¡Ya no confundo la b con la d!
• Estimula el desarrollo de la atención auditiva y de la atención visual.
• Favorece el desarrollo de la grafomotricidad centrándose en los trazos implicados en la escritura manual.
• Desarrolla distintos niveles de la conciencia fonológica, especialmente el léxico y el silábico, favoreciendo el posterior aprendizaje del código alfabético.
• Permite detectar escolares que podrían tener dislexia. ¡Por más que practico me cuesta mucho desarrollar estas habilidades!
• Como todos los materiales de Diverlexia, incluye una selección de palabras y contrastes basados especialmente en los errores que cometen los escolares con dificultades en la lectura del español.
• Potencia el aprendizaje en todos los niños, siendo especialmente necesario para quienes presentan peor habilidad lectora.
¿Por qué la conciencia fonológica?
Leer y escribir no consiste en otra cosa que en aplicar un código de símbolos para transcribir el lenguaje oral.
La conciencia fonológica es la comprensión que tenemos sobre ese lenguaje oral o habla (sonidos que lo componen, secuenciación de los mismos, silencios…).
Si no tenemos claro cómo suenan las palabras y por qué están formadas difícilmente podemos pasarlas a un código escrito sin errores.
Por tanto, tener una representación mental muy clara de la fonología (de cómo suenan las palabras, cómo se segmentan, qué sílabas incluyen, en qué orden van los sonidos en ellas…) nos ayuda a aprender a leer-escribir y, sobre todo a hacerlo sin errores.
Numerosos estudios han demostrado la estrecha relación entre el desarrollo de la conciencia fonológica y el rendimiento lectoescritor. Por ejemplo, sabemos que las personas con dislexia muestran peor desarrollo de la conciencia fonológica y que aplicar programas de desarrollo de la conciencia fonológica en Educación Infantil favorece el aprendizaje de la lectoescritura.
Por tanto, cuando se trabaja la conciencia fonológica de manera explícita y sistemática preparamos a los niños y niñas para aprender a leer y a escribir con éxito, incluso a aquellos a los que más les va a costar.
El peor ERROR que cometemos al enseñar a leer es que muchos niños no están preparados para ello y asumen que no pueden.
Le cogen tirria a la lectura y con razón, porque les pedimos un sobreesfuerzo imposible. Acaban pensando que es muy difícil, que son torpes y disminuye su confianza y su potencial. Se genera un retraso lector y se habitúan al fracaso generando un rechazo enorme al colegio, a la lectura y al aprendizaje.
En definitiva, desarrollar la conciencia fonológica les permite partir de lo conocido; el lenguaje oral, facilitando el camino para que avancen con confianza.
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